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"Restauración y remodelación de casa antigua en Uharte Arakil."
En Candal Jareño Arquitectas estamos llevando a cabo la restauración y remodelación de una casa antigua en Uharte Arakil de 600m2 construidos.
Actualmente está en la última fase de la construcción.
El proyecto está ubicado en el corazón de Uharte Arakil, un encantador pueblo de la Sakana que destaca por su patrimonio histórico y su entorno natural
Unificación de espacios y distribución
Originalmente dividido en dos viviendas, esta propiedad cuenta con muros de piedra y una estructura de madera que hemos decidido conservar y realzar en nuestro proyecto. Los clientes, apasionados por los objetos con historia, valoran profundamente la rica herencia y las historias que esta casa guarda en sus muros.
En este proyecto unificamos espacios: las dos viviendas se han unido en la planta primera para crear un espacio cohesivo y funcional.
Espacio abierto y luminoso: hemos derribado/anulado el forjado de la última planta en la zona sur de la vivienda, creando un salón cocina de doble altura que maximiza la luz natural. Un estudio se ha añadido en una parte más alta de este espacio, aprovechando toda la luminosidad disponible.
La planta baja se ha adaptado para funcionar como garaje y taller de bicicletas antiguas, reflejando la pasión del cliente por esta afición.
Y, además en esta planta, se ha creado un pequeño apartamento para visitas que se abre a la plaza del pueblo.
Eficiencia energética
Se ha decidido instalar placas fotovoltaicas y se ha aislado toda la envolvente por el interior con 14 cm de lana de roca. Además, se ha implementado un sistema de suelo radiante con aerotermia, asegurando una climatización eficiente y sostenible. Se ha realizado un estudio exhaustivo del uso de la vivienda para valorar una potencia adecuada de las placas solares y si debe llevar baterías.
Cada detalle de este proyecto ha sido cuidadosamente pensado para maximizar la eficiencia energética, contribuyendo a un hogar más sostenible y confortable.
Materialidad
La estructura de madera original se ha dejado visible, aportando un carácter histórico y rústico al interior. Solo se ha reemplazado la estructura de la cubierta, que estaba muy dañada, añadiendo aislamiento para mejorar la eficiencia energética.
Se han ampliado los huecos en la zona sur para captar más energía solar. Además de han colocado grandes veluxes para incrementar la iluminación natural en el espacio protagonista de la vivienda: el salón cocina.
Estado actual
Actualmente, el proyecto está en fase de construcción y se espera que las obras concluyan para finales de verano. Hasta el momento, se ha completado la nueva cubierta y se han definido las particiones interiores.
El proceso constructivo es un arduo trabajo puesto que al ser una vivienda con 200 años de antigüedad se está tomando decisiones conjuntamente con la propiedad en todo el proceso de la obra.
Viendo cómo van quedando los espacios, inspiran acciones que en fase de proyecto no se habían tenido en cuenta.
Es muy bonito, porque es como un organismo vivo.
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